jueves, 16 de noviembre de 2017

Una educación para chicas


Son muchas las razones que validan y confirman las ventajas de una educación exclusiva de chicas. Vamos a verlas más adelante detalladamente, pero ahora dejen que las exponga de manera general: Las chicas por mucho que se pongan las nuevas corrientes del feminismo actual, son diferentes en su manera de ser, en su manera de pensar y en su manera de relacionarse con el mundo en general, en contraposición con las de los chicos. Y obviamente tienen cualidades físicas y anatómicas que carecen los varones. Pero como dicen los franceses, !Vive la différence! (!Viva la diferencia!) porque el hombre y la mujer están hechos para estar juntos y por eso se complementan tan bien, fue brillante el Creador al proyectarlos.

Hay una capacidad muy importante que tiene la mujer, y que muchas veces se quiere hacer olvidar intencionadamente, y es su capacidad de engendrar vida en su interior, capítulo por cierto que merece la pena detenerse en él, ya que de él depende la primera etapa fundamental de todo ser humano, que es su comienzo en la vida. Y por supuesto, la maternidad de la mujer, de educar a sus hijos desde la infancia, de alimentarles y cuidarles hasta que se sepan valerse por sí mismos.
Pero ahora, volvamos a la cuestión inicial: ¿Por qué un colegio de chicas?

1. Para realzar la feminidad de las chicas y potenciar su personalidad

Es importante dar a las chicas la oportunidad de formarse con otras chicas y aprender a cultivar su femineidad, en estos tiempos que corren, parece que da igual la manera de vestirse, la manera de comunicarse, de relacionarse... y no da igual, lo cierto es que es otra de las mentiras que nos quieren hacer creer. La mujer tiene que mostrar seguridad y elegancia en el estar al mismo tiempo. Pero por otro lado, no puede abandonar su componente netamente femenino, el hablar con dulzura pero con aplomo al mismo tiempo, el saber dar un toque de espontaneidad y de alegría al hogar. Y el ser ella misma en definitiva, con sus virtudes y sus defectos. Sin necesidad de llevar una máscara que desfigure cómo es por dentro, cómo siente, cómo late su corazón y cómo ama.
Vivimos en una sociedad de prisas y agobios, el que continuamente nos venden hacer las cosas sin esfuerzo, el buscar el camino fácil, pero ahí no está la felicidad. Se consigue por el camino contrario, buscando hacer felices a los que a uno le rodean, su familia, sus amigos... y para eso hay que dar lo mejor de uno mismo, renunciando a veces a la palabra "yo".

2. Para hacer amigas para toda la vida

Es muy importante que las chicas, lo mismo que los chicos estrechen lazos de amistad con las de su sexo, porque al fin y al cabo, va a ser con chicas con las que mejor van a entenderse, y porque es bueno que tengan un círculo de amigas de confianza en las que poderse apoyar. Y porque muchas veces van a ser más sinceras con otras chicas que con chicos, ya que no juega el componente sexual.

3. Para aprender a descubrir las mujeres que pueden llegar a ser

Durante el pasado siglo XX, la mujer ha librado muchas batallas para que se la dejara formar parte activa de la sociedad con todos los derechos y obligaciones que conlleva. Y lo han conseguido, pero ciertamente, todavía se tiene que trabajar más para que haya igualdad de oportunidades en todos los sentidos y en todos los aspectos de la vida para la mujer. Pero también el feminismo está entrando en un campo peligroso, el de querer postergar al varón, y de querer ocupar su puesto en todos los aspectos, y esto no sólo no es razonable, sino que es una insensatez. La mujer necesita al hombre y el hombre necesita de la mujer.

El hombre le proporciona a la mujer la protección y seguridad, a la vez que la da equilibrio emocional y psíquico y viceversa, la mujer le aporta al hombre muchas veces cordura y un abanico más amplio de ver la vida y no analizarla tan friamente desde el cerebro masculino. En definitiva, ambos se necesitan, y eso es la belleza en la relación entre el hombre y la mujer. Aclarado este punto, las niñas tienen que aprender a caminar hacia la vida adulta al igual que los chicos, por eso es importante que tengan modelos a seguir que les instruyan para aprender los diferentes papeles que pueden desempeñar: el de madre, esposa, mujer trabajadora, ama de casa...

4. Para concienciarse del papel primordial que deben ejercer el día de mañana en la educación de sus hijos

Las mujeres juegan un papel fundamental en la educación de sus hijos junto con los hombres. Su papel es insustituible por el marido, esto no quiere decir, que los hombres viudos no puedan educar a sus hijos, pero siempre faltará la figura maternal de la madre.

Sobre la educación conjunta de los hijos habla el documento vaticano Gravissimum educationis (capítulo 8, párrafo 27): "Colaboren, sobre todo, con los padres; juntamente con ellos tengan en cuenta durante el ciclo educativo la diferencia de sexos y del fin propio fijado por Dios y cada sexo en la familia y en la sociedad". Que hace referencia también como se puede ver, al importante papel que juega la Escuela en la educación de los hijos conjuntamente con los padres (padre y madre).

5. Para enseñarles a tratar a los hombres y a aceptarles en su masculinidad y virilidad y el importante papel que juegan también para la Familia

Las niñas han de saber los límites que no se deben pasar en la relación con los hombres. Y ciertamente, la publicidad y la sociedad en general, no ayudan en este sentido. Por eso es importante advertirlas de los peligros que conlleva tomarse a la ligera la sexualidad y las relaciones con los hombres. Han de saber no decir siempre que sí, y tratar con respeto y educación a los varones, lo mismo que se debe esperar de ellos.

6. Para aprender a responsabilizarse de sus obligaciones
Es una buena idea la educación de chicas de manera exclusiva, porque permite ayudarlas a formarse mejor, a no distraerse o competir por atraer a un chico. A no ser mujeres antes de tiempo, sino cuando la naturaleza y la edad lo diga. Y en definitiva para adquirir mayores habilidades y destrezas que les van a dar más éxito en sus relaciones con los demás y en el ámbito del trabajo.

7. Para potenciar su sensibilidad y su creatividad
Un entorno de chicas permite que las niñas refuercen su condición de mujer y desarrollen virtudes de la mujer como la ternura, la delicadeza, el trabajo meticuloso y detallista, su capacidad para abarcar múltiples situaciones y obligaciones, su empatía con el otro, su imaginación... Todo y eso y mucho más es posible potenciarlo y desarrollarlo cuando no están pendientes de los chicos todo el tiempo.

2 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo, es una buena opción la educación diferenciada, porque la educación de chicos y chicas es diferente, al igual que su psicología y comportamiento.

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  2. Hola...me gustaría que me dieran alguna información sobre algunas universidades católicas pero que sean internados, para mujeres de preferencia. Gracias Dtb

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